Verificar la movilidad y fuerza de los ancianos con demencia

La demencia, una condición que afecta la capacidad cognitiva y funcional, representa un desafío creciente en el envejecimiento de la población.  Atender a las necesidades de este grupo vulnerable requiere de estrategias innovadoras y flexibles, como la telesalud, que ofrece un puente entre la atención médica y el hogar del paciente. En este contexto, un estudio realizado en la Universidad Federal de São Carlos (UFSCar), en Brasil, ha demostrado la viabilidad de adaptar pruebas para verificar la movilidad y fuerza de los ancianos con demencia a distancia. Brindando una alternativa accesible y práctica para la evaluación de personas mayores con demencia. Algo que va a ser muy útil tanto en casa como en nuestra residencia de mayores en Ronda. Para evaluar a los mayores sin tener que acudir al hospital.

Evaluación de la movilidad y la fuerza de ancianos con demencia a distancia

Tradicionalmente, las pruebas de movilidad funcional y de fuerza muscular son herramientas esenciales en la práctica de kinesiólogos y fisioterapeutas. Permitiendo evaluar el proceso de envejecimiento, diseñar programas de ejercicio y monitorear la evolución de las intervenciones terapéuticas en personas mayores. Sin embargo, la aplicación de estas pruebas en el entorno clínico presenta desafíos como la accesibilidad, la movilidad del paciente y la disponibilidad del profesional. Por eso se han estudiado pruebas para verificar la movilidad y fuerza de ancianos con demencia.

La investigación de la UFSCar, liderada por Larissa Pires de Andrade, ha demostrado que es posible superar estos obstáculos con la implementación de un protocolo de telesalud que incluye:

• Capacitación de cuidadores: los cuidadores, figuras claves en el cuidado de personas con demencia, son capacitados para administrar las pruebas de manera efectiva y precisa, garantizando la calidad de los datos recopilados.
• Supervisión online por profesionales: un profesional de la salud, a través de una plataforma online, supervisa en tiempo real la realización de las pruebas, resolviendo dudas y asegurando la correcta aplicación de los protocolos.

La metodología: Adaptación y accesibilidad

El estudio involucró a 43 participantes con diagnóstico de demencia, quienes realizaron pruebas de movilidad y fuerza de ancianos con demencia en sus hogares, con la asistencia de sus cuidadores. Se emplearon métodos ampliamente reconocidos en fisioterapia, como la «Short Physical Performance Battery» (SPPB), que evalúa la velocidad al caminar, el equilibrio estático y la fuerza de las extremidades inferiores.

Además de la SPPB, se adaptaron tres pruebas para su aplicación remota:

• 30 Seconds Sit to Stand (30SSS): mide la fuerza y resistencia de las piernas, evaluando cuántas veces la persona puede sentarse y levantarse de una silla en 30 segundos.
• Time Up to Go (TUG): evalúa la velocidad y la capacidad de equilibrio al realizar una secuencia de levantarse de una silla, caminar tres metros, regresar y sentarse nuevamente.
• Time Up Dual Task (TUG-DT): mide la capacidad de ejecutar la secuencia del TUG mientras realiza una tarea cognitiva, como responder preguntas.

Adaptando las pruebas para la demencia: un desafío superado

La adaptación de las pruebas para personas con demencia fue un aspecto fundamental del estudio. La  coordinadora del estudio, Pires de Andrade, reconoce que los déficits cognitivos de los pacientes, como la disminución de la memoria y la atención, pueden dificultar la comprensión de las instrucciones.

Para superar este desafío, se implementaron medidas que simplificaron el proceso de evaluación:

• Instrucciones verbales claras y concisas: se utilizaron frases cortas, simples y pausadas para facilitar la comprensión por parte de los participantes.
• Preparación del espacio: el espacio donde se realizaron las pruebas fue adaptado para garantizar seguridad y familiaridad para el paciente.

Beneficios de la telesalud para el cuidado de la demencia

Los resultados del estudio revelaron la confiabilidad de las pruebas de movilidad y fuerza muscular aplicadas a distancia. Esto abre un abanico de posibilidades para la atención de personas mayores con demencia, ofreciendo beneficios clave:

• Amplio acceso a la evaluación: la telesalud facilita el acceso a la evaluación para personas que tienen dificultades para trasladarse a un consultorio debido a limitaciones económicas o físicas.
• Seguimiento personalizado: la supervisión online permite realizar un seguimiento más completo y constante de la evolución del paciente, ajustando el tratamiento según las necesidades individuales.
• Flexibilidad en la atención: la telesalud se adapta a las necesidades de cada paciente, ofreciendo una alternativa cómoda y accesible para el cuidado de la demencia en el hogar.

Un paso hacia la telerrehabilitación de la demencia

El estudio realizado por la UFSCar representa un primer paso hacia la implementación de programas de telerrehabilitación para personas mayores con demencia. La confirmación de la viabilidad de las pruebas a distancia abre la puerta a la adaptación de otros procesos de rehabilitación, como la terapia física y la terapia ocupacional,  para ser llevados a cabo en el ambiente domiciliario.

Conclusiones

La telesalud se presenta como una herramienta valiosa para mejorar el cuidado de personas mayores con demencia. La adaptación de las pruebas de movilidad y fuerza de ancianos con demencia para su aplicación a distancia. Junto con la capacitación de cuidadores y la supervisión online de profesionales, permite brindar atención personalizada y accesible a este grupo vulnerable.

La investigación de la UFSCar abre un camino prometedor para el desarrollo de programas de telerrehabilitación que mejoren la calidad de vida de las personas con demencia y sus familias, ofreciendo soluciones innovadoras para un desafío creciente en la salud pública.